Una misma suma, un único resultado y tantas formas diferentes de resolverla como personas lo intenten, en este caso TRES.
Candela, Iván y María aplican sus estrategias personales de cálculo, tales como los amigo del 10, del 100;la resuelven en dos pasos, en cuatro... ¿qué hay de malo en respetar los ritmos de madurez y los mecanismos personales de cálculo? Lo peor de esto es la hora de corregir: 20 niñ@s pueden equivaler a 20 sumas diferentes; lo mejor, el permitirles utilizar un algoritmo abierto donde pueden encontrar infinitas composiciones y descomposiciones de números.
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